
Cuando aquí comienza a ponerse el sol hace tiempo que para ti es de noche. Mientras recojo los bártulos de playa me detengo a contemplar como la luz se oculta sin ganas e imagino aquellas calles encapotadas y tu ánimo apagado bajo las farolas encendidas. Me apena la distancia y te recuerdo chapoteando entre las olas pero entonces me apena la ausencia y te imagino a mi lado porque sé que cuando pasen unas horas, aunque miles de kilómetros nos separen, los dos contemplaremos la misma luna.