
Alzo la vista y veo nubes o estrellas, pájaros volando. Rayas, sólo las que trazan los aviones sobre el cielo. Por eso las aves vuelan libres: al sur cuando sienten frío, al norte si les agobia el calor o junto a mi casa para descansar. Donde llegan son bien recibidas, anidan y comparten lagos y alimentos. Porque no hay rayas en el cielo, aunque tampoco en la tierra y se cierran las puertas.